Síndrome del impostor by Isabel
Siempre me gusta empezar con una definición de los términos. El síndrome del impostor es un fenómeno psicológico por el que la gente cree que no es inteligente, capaz o creativa a pesar de sus evidencias y habilidades demostradas.
Francamente, creo que hemos tenido todos este síndrome en una esquina de nuestra mente.
Debo confesar que, trabajando por cuentas ajenas, dicho síndrome ha estado muy a menudo presente en mi mente. Recuerdo esos compañeros que te hacen sentir inferior o que simplemente no te valoran. Voy a dejar abierto este debate de igualdad / superioridad, porque yo quiero hablar sinceramente de mi amigo el síndrome del impostor.
La verdad es que pienso que es inevitable tener el síndrome del impostor. Salir de su zona de confort es siempre muy difícil. Yo di el salto en junio de 2022. Ahora soy AV, y conocí a mi amigo el síndrome del impostor. Mi primer cliente ha sido mi salvación, mi flotador en este pantano lleno de cocodrilos. Este cliente me ha ayudado a confiar más en mi misma. Fíjate, mi propósito es ayudar a profesionales de cualquier sector en su emprendimiento delegando esas tareas dónde que no le aportan valor añadido. Y finalmente, este primer cliente me ha permitido sentirme valorada, estimada y, sobre todo emancipada, ofreciendo mis prestaciones de secretaria online. Gracias a este cliente durante este verano tan cálido, nuestro amigo el síndrome del impostor estaba en su esquina esperando otro asalto. ¿Porque lo digo? Por qué estoy convencida que es bueno tener el síndrome de impostor. Te permite superarte y lograr peldaño por peldaño un auto satisfacción. Es gratificante.
Me gusta decir que si tu negocio va bien el mío también. Seamos circular. Venzamos Venzamos junto dicho síndrome, aunque sin ir al otro extremo con su primo: Dunning Kruger.
Por eso, ofrezco servicios administrativos y comerciales a la carta según tu necesidad, mi slogan es delegar para crecer. Por qué uno mismo tiene que aceptar que no puede hacerlo todo solo. El primo Dunning Kruger está allí esperando en el pasillo para asaltar. Nada es peor que morir de éxito. Así que te invito a leer mi anterior artículo: delegar by Isabel.
Isabel, tu asistente virtual