Se ha aprobado por UNANIMIDAD la reciente LEY de medidas ante el reto demográfico y territorial de Extremadura, que contiene aspectos interesantes para las mujeres empresarias y emprendedoras de nuestra región.
El objeto de esta nueva Ley es establecer un marco de actuación en materia demográfica y territorial en Extremadura, prestando especial atención a la lucha contra la despoblación, así como garantizar los servicios básicos e igualdad de oportunidades para sus habitantes.
En este artículo abordaremos la visibilización de la mujer en el sector primario, que conlleva el apoyo institucional y compromiso de dar a la mujer un papel activo y relevante en este sector. Ya la Ley 6/2015, de 24 de marzo, Agraria de Extremadura, incluía menciones específicas y en el mismo sentido de las aprobadas recientemente. Deseamos que esta nueva Ley traiga lo que aquélla prometía.
En concreto se desarrollan las siguientes cuestiones:
1.- Apoyo del asociacionismo de las mujeres en el medio rural.
2.- Promoción de las mujeres en el medio rural. Se indican las siguientes actuaciones por parte de la Junta de Extremadura:
– Procurará que las necesidades de la mujer del mundo rural sean objeto de protección en las convocatorias de las ayudas derivadas de la Política Agraria Comunitaria.
– Se priorizará la titularidad de las mujeres en las explotaciones agrarias. Para ello, en las normas reguladoras de ayudas y subvenciones del ámbito agrario y de desarrollo rural tal prevalencia se realizará sobre las solicitudes cuya titularidad sea de una mujer, de una titularidad compartida, de una persona jurídica en la que el porcentaje o las participaciones sociales en manos de mujeres sean como mínimo el 50%, o para el caso de cooperativas, que tengan implantado un plan de igualdad de oportunidades, con mayor número de socias, y que el porcentaje de representación de las mujeres en los órganos de toma de decisiones sea igual o mayor al porcentaje que representan en su base social.
3.- Acceso a la titularidad de las explotaciones agrarias por parte de las mujeres. Destacar que la Junta de Extremadura promoverá la figura de la titularidad compartida, colaborando con el Ministerio competente en su desarrollo y mejora.
Es necesario recordar que la Ley 35/2011, de 4 de octubre, sobre Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias supuso un avance en este sentido al dar visualización a las tareas agrarias desarrolladas por las mujeres, puesto que, a pesar de que las mujeres venían dedicándose a estas labores, al ser empresas familiares, en muchos casos eran los hombres los que figuraban como titulares de las explotaciones, entendiéndose las labores agrarias de la mujer como una prolongación de sus tareas de cuidado a la familia. El reconocimiento de la posibilidad de la titularidad compartida conlleva que la mujer es partícipe al 50% de los beneficios de la explotación, que puede ser beneficiaria directa de las subvenciones vinculadas a la explotación y que puede cotizar.
Es indiscutible que, a pesar de la Ley del 2011 y aunque se ha avanzado en este sentido, todavía queda camino por recorrer. Por ello, la Ley de medidas ante el Reto Demográfico viene de nuevo a poner acento en esta cuestión.
4.- Fomento del empleo de las mujeres en el medio rural. Este estímulo se realizará a través de líneas de ayuda para el autoempleo y la contratación, así como para la creación de entidades de economía social por mujeres en todos los sectores productivos del medio rural. Veremos la dotación futura de estas líneas.
Resulta importante la siguiente medida, en la que, de nuevo, se establece una priorización de la mujer, de modo que en las normas reguladoras de subvenciones del ámbito agrario y de desarrollo rural se establecerá, para los procedimientos de concurrencia competitiva, un sistema que, establezca prevalencia a la contratación y promoción profesional de mujeres por las empresas del ámbito rural.
5.- Medidas de promoción de acceso a la tierra. Se indica que esta medida se hará en consonancia con la Ley 6/2015, de 24 de marzo, Agraria de Extremadura, que ya establecía en su articulado las mismas medidas, y a pesar de su indiscutible buena intención, es de complicada conformación jurídico-legal, por lo cual esperaremos a su desarrollo reglamentario.
Como puede apreciarse esta Ley de nuevo destaca el papel esencial, vigente, actual y de futuro, de la mujer en el medio rural, en el cual, con mayor tesón que en otros entornos más favorables, hay que trabajar por la igualdad y procurar que la opción de la mujer rural sea un proyecto de vida viable y pleno.
Ana Sevilla Rico
Abogada (I.C.A.Cáceres)